lunes, 27 de enero de 2020

La Puerta de la Poesía: "Senegalesa", de Berta Piñán.







SENEGALESA





Diles que pregunten por mí

en la aldea de Thiaroye, allí me conocen, 

saben quién es mi madre y que le llaman

Ndiémé, saben quién es mi hermana Bébé,

cuál es mi casa, allí me conocen.

Diles que pregunten por mí a la vieja Misia

que me vio nacer y que me curó de la fiebre

y estuvo una vez en la ciudad de Thiés a por un diente de oro,

que pregunten por mí a mi primo Makalou

que lleva a los turistas en su barca de pesca.

Que pregunten a mi gente, allí me conocen.

Díselo. No tengo papeles, pero allí saben quién soy,

allí me conocen.


BERTA PIÑÁN

lunes, 20 de enero de 2020

La Puerta de la Poesía, "Tiempo largo", de José Carlos Rosales, en Poemas a Milena.



TIEMPO LARGO






Me estoy enamorando, todavía

me estoy enamorando. Ya lo sabes,

soy muy lento, la prisa no me gusta,

no es buena consejera: cuando quiero

una cosa, la miro y, si es valiosa,

me acerco muy despacio, nunca escojo

el camino más fácil. Llegar antes

no sirve para nada, lo que quiero

es llegar para quedarme, llegar,

llegar sin contratiempo. Ya lo sabes,

todavía me estoy enamorando:

más lejos llegaré cuanto más tiempo

gaste en llegar, porque el tiempo gastado

ahora no será tiempo perdido.


José Carlos Rosales, de Poemas a Milena, 2011

domingo, 12 de enero de 2020

La Puerta de la Poesía: Troppo Mare, de Javier Egea.


TROPPO MARE

Extraño tanto mar, raro este cielo
desgranado de luz sobre la Isleta,
ajeno a este naufragio que se crece en la orilla
en cabos,
jarcias,
mástiles,
jirones de velámenes,
armaduras y redes
que simulan encaje en la escollera,
duelas con algas,
pequeñas almadías despobladas
sobre la espalda azul del exterminio,
raro este cielo para ser de mayo,
ajeno a este dolor de siglos en la playa.
Tanto mar y de golpe,
tanta historia y vencida,
ya corazón mojado sobre el abra,
ya mensaje dormido, preterido,
en la Bahía de los Genoveses.
Y no sólo el desierto sino dónde tus ojos,
sino tus manos lejos
y cuándo tu cintura presentida
por entre los hachones vigías de las pitas,
desde las atalayas del silencio,
no sólo ya las dunas sin
espejismos al cabo,
restos de la memoria del misterio.
A dónde, dime, a dónde,
si todo está dormido,
si he quedado en la arena como lengua de agua
y la sed permanece mientras llega La Nube.
Inútiles las manos que desde las palmeras
pretenden el abrazo de un horizonte roto
a donde tu recuerdo se avecina.
Javier Egea, Troppo Mare, ed. Dauro, 1984

miércoles, 8 de enero de 2020

La Puerta de la Poesía: "Al borde", de Gloria Fuertes.

Al borde
Soy alta;
en la guerra
llegué a pesar cuarenta kilos.
He estado al borde de la tuberculosis,
al borde de la cárcel,
al borde de la amistad,
al borde del arte,
al borde del suicidio,
al borde de la misericordia,
al borde de la envidia,
al borde de la fama,
al borde del amor,
al borde de la playa,
y, poco a poco, me fue dando sueño,
y aquí estoy durmiendo al borde,
al borde de despertar.


Gloria Fuertes, de Antología y poemas de suburbio, 1954